Hace unos años era prácticamente impensable que el ser humano pudiera ‘volar’ como si fuera un pájaro, pero hoy en día hay diferentes maneras de experimentar esa sensación de libertad y ese subidón de adrenalina que supone que el viento golpee tu cara.

Dos formas muy parecidas pero, al mismo tiempo, muy diferentes de conocer en primera persona esa experiencia que sólo pueden disfrutar las aves y Superman son lanzarse desde una gran altura con un paracaídas o meterse dentro de un túnel de viento. La sensación es, sorprendentemente, muy similar pero son dos actividades diferentes y que se practican con técnicas radicalmente distintas. Conoce en este post qué es el paracaidismo y qué es el paracaidismo indoor y descubre las principales características que diferencian a una y otra actividad. ¿Eres lo suficientemente osado como para probarlas las dos? Atrévete a volar con dos actividades que cada vez cuentan con más intrépidos adeptos.

Qué es el paracaidismo indoor

En este blog ya te hemos hablado de esa sensación de volar sin tener que saltar desde un avión y de esos aparatos que nos permiten experimentar algo parecido gracias a los llamados túneles del viento o simuladores de paracaidismo.

A esa actividad en la que una persona ‘vuela’ sin tener que tirarse en paracaídas es a la que conocemos como paracaidismo indoor o paracaidismo de interior.

La experiencia es igual pero la forma de conseguir esa sensación es diferente.

El paracaidismo indoor es una actividad que se realiza en un espacio interior. Consiste en entrar a un túnel de viento que nos impulsa con una fuerte corriente de aire. Ese viento mantiene suspendido nuestro cuerpo, ejerciendo oposición, de la misma manera que si hubiéramos saltado de un avión y abierto nuestro paracaídas, pero sin necesidad de ninguna de las dos cosas.

Es una actividad de ocio que cada vez está teniendo mayor crecimiento pero, además, sirve para practicar antes de enfrentarse a la experiencia real del paracaidismo al aire libre.

Hay quien no entiende la similitud pero ese aire vertical que nos impulsa en el paracaidismo indoor es un obstáculo que hay que aprender a controlar, haciendo volar nuestro cuerpo, igual que ocurre con el paracaidismo.

Básicamente, el paracaidismo de interior simula esa parte de la caída libre desde el avión pero, como es lógico, aunque la sensación es muy parecida, es obvio que no es comparable con lanzarse desde cuatro kilómetros de altura.

¿Qué es el paracaidismo?

La sensación es parecida pero, como te decimos, el paracaidismo y el paracaidismo indoor no son lo mismo.

El paracaidismo es una técnica de salto con paracaídas desde un avión. Se trata de un deporte que consiste en saltar con paracaídas desde un avión, desde un helicóptero, desde un globo aerostático o desde una montaña o desde otro tipo de altura.

Por tanto, se trata de una actividad que se practica al aire libre -desde las alturas, para ser más concretos- y que requiere de un paracaídas como material principal, pues es el que permite amortiguar el impacto del aterrizaje.

Hay que lanzarse al vacío desde una altura considerable y luego ir controlando la dirección y la velocidad con tu cuerpo en la caída gracias a la ayuda de ese paracaídas que va frenando el viento. Por eso, obviamente, hay que activar ese artilugio para poder aterrizar de la manera más segura posibles.

¿Qué características tiene el paracaidismo?

  • El peso del cuerpo es el que hace que, al caer, ese paraguas de tela se abra.
  • La superficie del paracaídas puede ser de 50 metros y, aunque su forma clásica era circular, ahora también existen en forma rectangular.
  • La velocidad de caída es de cinco metros por segundo o 18 kilómetros por hora
  • Puede ser una actividad recreativa deportiva, de competición, militar y de transporte. Dependiendo del nivel, se puede obtener un título de paracaidismo u otro, como ya te hemos hablado aquí en alguna ocasión.

Principales diferencias

Como te resultará lógico pensar, la principal diferencia entre el paracaidismo y el paracaidismo indoor es que uno se practica al aire libre y que el otro se realiza en interior.

Otra de las diferencias elementales es que el paracaidismo consiste en lanzarse al vacío desde una gran altura, mientras que el paracaidismo indoor no requiere de ningún lanzamiento, sino que es una columna de aire vertical la que impulsa tu cuerpo hacia arriba, generando una sensación parecida a la de lanzarse en paracaídas pero sin necesidad de utilizar este artilugio, otra de las diferencias claves.

En el paracaidismo indoor se experimenta una sensación similar a la del momento de la caída libre en un salto con paracaídas y el control del cuerpo es el mismo, pero la emoción es incomparable. Digamos que no tiene las mismas ‘mariposas’ en el estómago.

Normalmente, la caída de un salto en paracaídas normal dura entre 45 segundos y un minuto pero los túneles de viento recrean esa misma sensación durante más tiempo porque, en principio, no hay limitación.

Cuando saltas desde un avión lo haces a una altura de unos 10.000-13.000 pies y eso no existe en el paracaidismo indoor, donde basta con meterse dentro del aparato y dejar que el viento haga volar nuestro cuerpo.

Como decimos, tampoco necesitas el paracaídas dentro de un simulador de paracaidismo, donde lo único que vas a usar es un mono, un casco, unas gafas protectoras y unos tapones para los oídos.

Para practicar paracaidismo tienes que tener en cuenta las condiciones meteorológicas (vientos, nubosidad, temperaturas, posibilidad de precipitaciones, etc.). Sin embargo, para el paracaidismo indoor no hace falta mirar al cielo, porque al ser en interior ese problema desaparece.

Por tanto, una actividad es mucho más extrema que la otra, porque también conlleva más riesgos, pero eso significa que el paracaidismo indoor no tiene demasiadas limitaciones de edad, por lo que se puede practicar con niños y mayores. Y también está indicado para personas con mucho vértigo que se pierden la sensación del paracaidismo porque les resulta imposible subirse a un avión y lanzarse al vacío.