Descubre en este post qué tipos de botas de esquí existen y cómo elegir las más adecuadas para ti.

¿Cómo son unas botas de esquí?

Las botas de esquí son uno de los elementos más importantes de nuestro equipo para la nieve. Están hechas para adaptarse a los esquís pero también con la idea de que puedas caminar con ellas.

Pero no sólo su suela es distinta a unas botas normales. Se trata de un calzado más rígido de lo habitual, bien preparado térmicamente para el terreno en el que vas a utilizarlas y que combina ligereza y resistencia para que practicar deporte con ellas sea tan confortable como seguro al mismo tiempo.

Diferentes tipos y usos de botas

El mundo del esquí y del deporte de invierno, en general, ha evolucionado mucho en los últimos tiempos. Se han mejorado mucho las equipaciones para la nieve, por lo que las posibilidades son realmente incontables.

Lo habrás notado a la hora de preparar tu equipo. El mero hecho de elegir unas botas para esquiar ya te supone un auténtico quebradero de cabeza porque tienes que fijarte en un montón de elementos para escoger las más adecuadas y porque en función del uso que vayas a darles tendrás que optar por unas botas u otras.

La categorización de los tipos de botas de esquí también es muy variada en función de las características a las que atendamos. Vamos a intentar resumir las más habituales.

Modelos básicos de botas de esquí

  • Botas con enganche: Tienen una apertura delantera a lo largo de toda la bota para mayor flexibilidad aunque son difíciles de calzar. Es el modelo más extendido entre los esquiadores.
  • Botas con entrada trasera: Dan menor flexibilidad en la parte delantera pero son más fáciles de calzar que las anteriores. Son las más usadas por esquiadores amateur o de nivel medio.
  • Botas mid: Combinan características de las dos anteriores pero no resultan muy flexibles. Son las más extendidas entre esquiadores de nivel medio o avanzado.

Botas en función de la modalidad de esquí que practiques

  • Botas de esquí alpino: Están pensadas para usarlas con esquís y fijaciones alpinas, que aseguran la puntera y el talón de la bota. Protegen los pies del frío y absorben las vibraciones. Su cubierta exterior es de material resistente y tienen un punto de giro cerca del tobillo para facilitar los movimientos.
  • Botas de freeride: Están diseñadas para mezclar el esquí alpino con el de travesía (fuera de pista). Son botas rígidas pero que permiten la movilidad gracias a un sistema que desbloquea el talón para caminar. Son las botas más polivalentes porque se pueden usar con cualquier fijación y en todas las disciplinas.
  • Botas de esquí de montaña (skimo): Este diseño suele tener un modo para caminar que se puede activar o desactivar en función de si se necesita o no mayor flexibilidad para ascender o para girar en terreno llano. Y se bloquea en los descensos para tener mayor estabilidad. Su suela es de goma, lo que le da mejor tracción para caminar por la nieve sin esquís.

Botas de esquí en función de tus necesidades

  • Botas Race: Son botas más confortables, con carcasa personalizable, materiales térmicos y buen rendimiento.
  • Pista y All Mountain: Estas dos categorías son, a menudo, la misma. Las botas de pista son las de caña y suela plásticas convencionales y las all mountain tienen suelas antideslizantes y, a veces, es posible desbloquear su caña.

Como ves, es muy fácil volverse loco con el tipo de botas de esquí por la gran cantidad de clasificaciones que tienes para elegir.

Eligiendo la bota

Al contar con tantos tipos de botas de esquí y tantos aspectos en los que fijarnos para elegir la bota que mejor se adapte a nuestras necesidades, te vamos a dar algunas pistas para que sepas en qué cualidades debes fijarte a la hora de elegir las mejores botas de esquí para ti.

Talla y horma

Esto es obvio. Vas a meter tus pies dentro y, por tanto, las botas han de adaptarse correctamente a la forma, longitud y anchura de tus pies. ¿Cuál debes elegir? ¿En las botas de esquí, qué tallas existen?

  • Talla muy estrecha si vas a competir (92 mm).
  • Talla estrecha o corta si tu pie tiene una anchura de 97-98 mm.
  • Talla normal o media si la anchura de tu pie alcanza los 100 mm.
  • Talla ancha o larga si el ancho de tu pie es de 102-106 mm.

Las botas de esquí se tienen que ajustar con exactitud a tus pies, al contrario que con los zapatos normales. No elijas una talla que te esté grande, es un error frecuente entre los esquiadores. Y tampoco una horma que te quede estrecha porque es muy importante la comodidad.

Material y rigidez

Otro aspecto que tienes que tener muy en cuenta a la hora de elegir unas botas de esquí es su rigidez. Eso se lo aporta el tipo de material con el que están hechas.

Fíjate en la resistencia y dureza de los materiales y en su inclinación, en si te permitirá doblar el pie hacia adelante, si te permitirá cierta flexibilidad de movimientos.

Otras características

La morfología de tu pie o la comodidad de las botas de esquí es fundamental, pero no sólo debes fijarte en eso, porque en unas botas de esquí también hay que tener en cuenta cómo son el cierre de la caña o los apoyos de las botas, si eres hombre o mujer y, por supuesto, también tu nivel de experiencia en las pistas.

En base a todo eso, el tipo de calzado que elijas será de una u otra forma. Por eso, déjate asesorar por quienes conocen todos estos aspectos y te indicarán cuáles son las más adecuadas para ti.

Ejemplo de mejores botas

Salomon, Fischer, Lange, Head o Dalbello son algunas de las mejores marcas de botas de esquí que hay actualmente en el mercado, con los modelos más avanzados y versátiles. No es un producto barato, quizá como ninguno que tenga que ver con la nieve, pero merece la pena invertir en unas botas de calidad si realmente les vas a dar uso.

A continuación puedes ver algunos ejemplos de las mejores botas de esquí que puedes elegir: