Si te interesa el mundo del motor, en este post te hablamos de los rallyes, para que sepas exactamente qué son, qué categorías existen y qué tipos de vehículos pueden participar en ellos.

¿Qué es un rally?

En el mundo del motor, un rally es una competición deportiva de velocidad y resistencia en la que pueden participar vehículos de cualquier tipo, normalmente motor y coches, que se desarrolla en una carretera, pista o camino complicado y que consiste en completar un determinado itinerario, generalmente por etapas, en el que se superan diferentes pruebas o controles sin exceder el límite de tiempo prefijado.

Estos itinerarios se suelen corresponder con carreteras u otras vías que normalmente están abiertas al tráfico y no en circuitos específicos diseñados para la realización de la prueba.

Eso sí, estas vías se cierran para el resto de ciudadanos mientras se disputa la competición para que sólo los vehículos participantes las atraviesen durante el tiempo que dura la prueba.

¿Qué características tiene un rally?

Un rally (también llamado rallye ​​ o rali​) tiene una serie de características que lo diferencian de otras competiciones automovilísticas:

  • El objetivo principal de este tipo de carreras es completar el recorrido en el menor tiempo posible.
  • Las carreras se disputan en carreteras que normalmente las puede usar cualquiera pero que se cierran para que se pueda desarrollar la prueba.
  • La carrera se divide en tramos y el resultado obtenido en cada uno de ellos se contabiliza de forma individual. Después se suman las puntuaciones para obtener la clasificación final.
  • Los tramos no tienen por qué ser contiguos unos de otros (de hecho, no es lo habitual). Eso provoca, como curiosidad, que mientras los vehículos participantes recorren esas zonas intermedias deban cumplir con las normas de circulación y compartir las vías con el resto de conductores hasta llegar al siguiente tramo.

Tipos de rallys

No hay una única modalidad de rallys (o rallyes). Así, podemos encontrar distintos tipos en función de diferentes factores como el tipo de vía por la que se circula, el tipo de vehículos que se utilizan o el tipo de competición a la que se enfrentan los pilotos.

La clasificación más habitual de los tipos de rally que existen, tanto a nivel nacional como internacional, obedece al tipo de superficie en el que se desarrollan las carreras y es el siguiente:

Rally de tierra

La carretera de esta categoría de rallys está sin asfaltar y tiene la particularidad de que, en muchas ocasiones, es frecuente encontrar ciertos tramos secretos que no son reconocidos por los pilotos hasta el mismo día de la competición.

Rally de asfalto

En este caso, la vía está asfaltada y suele tratarse de carreteras convencionales, por las que los conductores circulan de forma habitual.

Rally sobre hielo

No hace falta mayor explicación. Este tipo de pruebas se disputan sobre un terreno helado o nevado y, aunque se disputan con las mismas reglas que el resto de rallyes, los neumáticos de los vehículos deben ser especiales para no perder el control sobre este tipo de superficie.

Rally Raid

Este tipo de rally se disputa campo a través, por caminos de tierra y desierto, donde una de sus grandes dificultades radica en que los pilotos deben encontrar la ruta adecuada por la que circular. También aquí el tipo de vehículo es importante. Así, además de coches y motos pueden participar camiones o quads y, como ya estarás pensando, el más conocido de todos es el Rally Dakar.

Aunque lo normal es que un rally se corresponda con alguna de estas tres categorías, tampoco es extraño que un mismo rally se dispute sobre varias de estas superficies a la vez. La combinación de diferentes superficies puede verse, por ejemplo, en el Rally de Montecarlo, que aúna nieve y asfalto.

Atendiendo a otras características de la competición podemos mencionar también otros tipos de rallys:

Rally de regularidad

Esta competición establece un tiempo óptimo para cubrir cada tramo y los pilotos que no sean capaces de ceñirse a él serán penalizados. Quien más se acerque al tiempo total de la prueba al final de la misma será el ganador.

Rally 4×4

En este tipo de rallyes sólo pueden participar vehículos todo terreno y se pueden encontrar tres modalidades:

  • Raid: Recorridos lineales de 100 a 300 kilómetros que se recorren dos veces.
  • Resistencia: Recorridos de entre 40 y 70 kilómetros a los que se les dan varias vueltas hasta completar, como mínimo, los 450 kilómetros.
  • Mixtas: Recorridos en los que se combinan las dos modalidades anteriores.

Otras categorías de rallys

Además de estas modalidades, hay otros tipos de competiciones que son interesantes de destacar y que se basan en el tipo de vehículo que se utiliza:

  • Rallys históricos o clásicos.
  • Rallys ecológicos (con coches eléctricos o híbridos).

Y también hay otras dos categorías que atienden a otro tipo de clasificación:

  • Criterium: El itinerario está en bucle. Se dan varias vueltas al mismo pero no en un circuito cerrado sino en carretera.
  • Rallysprint: Son competiciones muy cortas, con pocos tramos y menor duración.

Categorías de coches y especificaciones

No hace mucho se reorganizaron las categorías de coches que pueden competir en rallyes nacionales e internacionales, realizando una clasificación en función de los datos técnicos de los vehículos participantes. A continuación mencionamos cuáles son las diferentes clases y categorías de coches de los rallys:

  • R1: Coches parecidos a los urbanos normales pero con sistemas de seguridad como la barra antivuelco o la jaula de seguridad en los asientos delanteros. También hay ajustes en la suspensión, el freno de mano y los neumáticos. Tienen un máximo de 1.600 centímetros cúbicos.
  • R2: Cilindrada máxima de 2.000 centímetros cúbicos. Desarrollan una potencia de entre 170 y 180 caballos.
  • R3: Alcanzan los 240 caballos, con tracción delantera o trasera y posibilidad de motores turboalimentados.
  • R4: Tracción total, 300 caballos de potencia y motores turboalimentados.
  • Grupo N: Modificados para la competición pero muy parecidos a sus versiones de calle.
  • S1600: Máxima potencia de 230 caballos, tracción delantera y caja de cambios de serie modificada por una secuencial.
  • S2000: Potencia de 280 caballos y tracción a las cuatro ruedas.
  • RGT: Deportivos modificados con más de 300 caballos de potencia.
  • R5: Antesala de los WRC pero con 20 caballos menos.
  • RRC: Motor 1.6 turboalimentado y una brida de 30 milímetros.
  • WRC: Motor 1.6 turboalimentado, brida ajustada a 34 milímetros según la normativa de la FIA y 300 caballos.
  • Históricos: Viejos coches reacondicionados para la competición.
  • Rallycross: Coches reconvertidos de bajo coste.