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Cuando hablamos de deportes de invierno, los que no estamos acostumbrados a practicarlos enseguida pensamos que son demasiado elitistas. Que practicarlos cuesta demasiado dinero, o que hay que sacrificar muchas cosas para poder llegar a destacar en ellos. Eso sí, si de verdad nos gustan… ¿no bastaría por cambiar nuestras vacaciones en la playa por otras en la montaña? La verdad es que disfrutar del snowboardcross bien lo vale.
Ahora que se acerca la temporada de frïo, y con ella la posibilidad de volver a disfrutar del SBX, la auténtica sensación del último invierno, vamos a contaros sus claves. Todo lo que hay que saber para cogerle el gusto a una disciplina que es una auténtica pasada y que puede empezar a practicarse en cuanto aprendamos a no caernos de la tabla y a dominar nuestros primeros trucos sobre ella. Se acabaron las excusas, ¡de este año no pasa que empecemos a pasárnoslo genial gracias al boardcross!
Qué es el Snowboardcross
Antes de profundizar más sobre las claves del boardercross, lo primero que debemos tener claro es en qué se diferencia del resto de categorías. Sí, seguimos deslizándonos por una pendiente sobre una tabla de snow, pero no tiene nada que ver con modalidades como las que detallamos a continuación:
- Big Air: En este tipo de pruebas, el rider se desliza en soledad por una enorme rampa que termina en otra más pequeña, pero ascendente. Esto hace que dé un enorme salto y que, durante el vuelo, pueda ejecutar sus mejores trucos aéreos.
- Half pipe: Esta modalidad de snow consiste en deslizarse por una pendiente que tiene forma de medio tubo. El objetivo es aprovechar los laterales para ir saltando y haciendo trucos. Al final, el que obtenga la mejor puntuación en función de la complicación de su ejercicio, se lleva la victoria.
- Slopestyle: Es, probablemente, una de las disciplinas más espectaculares de ver. Desde Socchi 2014 es olímpica, y los riders que deciden competir en ella deben ser de lo más completos. Se deslizan en soledad por una pendiente con varios obstáculos que deben decidir cómo grindar y la prueba termina con un enorme salto. Para puntuar lo máximo, deben centrarse en mostrar una amplia selección de trucos, no en utilizar siempre el mismo.
Una de las diferencias principales entre el SBX y todas estas disciplinas, es que las anteriormente citadas se practican en completa soledad, mientras que en el snowboardcross compiten varios rider a la vez. Eso sí, nada que ver con el slalom, en el que bajan la rampa en paralelo. En el boardcross el contacto con el resto de participantes es completamente inevitable, ¡las carreras son puro espectáculo!
En qué consiste el SBX
Junto con la disciplina del slopestyle, el boardcross es una de las más trepidantes que se pueden practicar sobre una tabla de snow. Se trata de una carrera, pero a diferencia del slalom, en la que compiten dos participantes y también influyen los puntos por haber pasado por todas las banderas, el sistema es distinto. Se convirtió en olímpico en el año 2006, y en España podemos presumir de tener grandes especialistas en esta auténtica aventura sobre la nieve que destaca por estas características:
- No hay puntos, gana el primero en llegar a la meta
- Los riders salen todos a la vez a la misma pista, por lo que el contacto físico es una parte más de la prueba
- Deben enfrentarse a distintos obstáculos: saltos, giros, caídas… estos no puntúan, pero sí ponen a prueba la pericia del participante
Ojo, el hecho de que pueda haber contacto no significa que cualquier tipo de contacto sea permisible, más bien al contrario. Cualquier movimiento malicioso hacia otro rider significa la descalificación automática del corredor, aunque estos sí que pueden obstaculizar un adelantamiento con sus propios cuerpos.
Al final, lo único que cuenta para la clasificación, si no se ha incurrido en una falta que conlleve la descalificación de la prueba, es el tiempo que se haya marcado. Se trata de lo más parecido que podemos vivir en este deporte a una carrera como tal, con corredores en vez de rider, y es una auténtica gozada.
Qué se necesita para practicar SBX
Por fortuna, aunque son varios los deportes de nieve que necesitan de material específico, para practicar snowboardcross no necesitaremos nada distinto al equipamiento que ya solemos utilizar para practicar snow.
- Tabla de snowboard y sus correspondientes fijaciones
- Ropa térmica para no pasar ni gota de frío durante el ejercicio
- Botas, casi igual de importantes que la tabla
- Casco, que nunca se sabe
- Guantes impermeables, ¡tocaremos el suelo más de lo que pensamos!
- Crema solar y gafas de sol, indispensables para pasar horas y horas en la nieve
¿Y qué más? Pues ganas de divertirse, arrojo y valentía, ya que como en toda buena carrera… ¡las altas velocidades están más que aseguradas!
Eso sí, tal y como os hemos contado, la pista está llena de obstáculos y dificultades. Por eso, lo mejor es que nos aseguremos de cómo es el trazado y de qué cosas que debemos tener en cuenta antes de bajarla a toda pastilla. Sin duda, la experiencia merece muchísimo la pena, sobre todo si competimos contra nuestros amigos, ya que el pique está totalmente asegurado.
Grandes logros del snowboardcross español
A pesar de que su inclusión como deporte olímpico es relativamente nueva, en nuestro país contamos con la tremendamente de contar con un par de figuras a nivel mundial. La primera de ellas, Regino Hernández, fue la auténtica sorpresa de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeonchang 2018. Allí, el ceutí consiguió hacerse con una histórica medalla de bronce para el deporte masculino español, todo un hito para el SBX patrio.
Pero eso no es todo. El equipo nacional de esta disciplina compitió en Mundial de 2020, celebrado en el mes de marzo de ese mismo año, con otro fuera de serie del boardcross a nivel planetario. Hablamos de Lucas Eguibar, subcampeón del mundo en 2017 en la pista granadina. Sin duda alguna, el snwboardcross ya empieza a contar con una buena tradición en España. De momento ya hay cantera, ¡y estamos seguros de que seguirá dándonos grandes alegrías!